LAS CHINAS LINDAS

RECOPILADORA: XIOMARA MEDINA GONZALES


En un pueblo de la sierra vivían dos señoritas muy guapas, también vivía un joven que estaba enamorado de las dos señoritas pero ninguna le daba importancia. Cierto día planearon fingir ser sus amigas para deshacerse del joven.

Lo invitaron al campo donde encontraron un caballo muerto lo abrieron y le dijeron vamos a jugar a meternos dentro, primero se metió una y dijo:¡Qué lindo se siente! luego entró la otra y también dijo: ¡De verdad, se siente bien!; ahora te toca a ti le dijeron al joven. El inocente entró, enseguida cosieron el caballo con el muchacho dentro, sólo dejaron su cabeza afuera; y lo dejaron allí. Él rogó que lo sacaran, pero ellas no hicieron caso y se fueron.

Cuando los gallinazos vinieron a comer al animal muerto, él gritaba y movía la cabeza para espantarlos. La gente al ver a los gallinazos que no llegaban a bajar al suelo fue a ver qué pasaba y encontraron al joven, lo sacaron del caballo muerto y se lo llevaron.

Pocos días después volvieron a encontrarse los tres, ellas se disculparon, él aceptó las disculpas, y propusieron otro juego, se trataba de "jumbol" y él aceptó. El juego trataba de descolgarse con una soga por un barranco, primero se colgó una de ellas y dijo:¡Qué bonito se siente! luego la otra y también dijo:¡Ah! ¡De veras se siente bonito! ahora te toca a ti le dijeron al muchacho. Pero él se negó, les dijo: ustedes me dejarán y no me sacarán, ellas hasta le juraron que no lo dejarían y lo convencieron. Lo colgaron y una vez en el barranco lo dejaron allí, él suplico que lo sacaran, que no lo dejaran, pero ellas no hicieron caso y se fueron.

El muchacho no llegó a su casa y luego de tres días su mama se preocupó y salió a buscarlo con su perro, y lo encontraron colgado en la peña, muerto. La madre del muchacho avisó al guardia, las jóvenes eran las sospechosas, el guardia fue directo a ellas y al verlas dijo:¡Qué chinas tan lindas! ellas subieron hacia un monte y al ver que no podían escapar del guardia se convirtieron en aves, alzaron el vuelo y escaparon.

Desde ahí esas aves son conocidas como "chinas lindas".



FUENTE: María Gutiérrez Sánchez